Crítica de Historias del buen valle (2025): reseña y opinión del documental
La mirada de Guerín
Puntuación (5/5)
A falta de dos días para que acabe la 73 edición del Festival de Cine de San Sebastián, quedaba uno de los platos fuertes en una Sección Oficial en la que han sobresalido los nuevos trabajos de Alauda Ruiz de Azúa y Milagros Mumenthaler. Quedaba para esta recta final del festival el retorno de uno de los grandes realizadores de la historia del cine español, como lo es José Luis Guerín; una figura indispensable de nuestro cine, artífice de obras maestras como Tren de sombras (1997) o En construcción (2001). Hacía ya diez años de su último largometraje La academia de las musas (2015), y la expectación con esta nueva película presentada a competición era alta, como no podía ser de otra manera.
Historias del buen valle (2025) es un documental sobre el barrio de Vallbona, un barrio del extrarradio de Barcelona que ha vivido en la marginalidad desde sus cimientos a principios de la posguerra española hasta la actualidad. Una zona de Barcelona en la que se ha edificado durante muchos años en la clandestinidad, y en la que habitan toda clase de etnias y nacionalidades.
Decía José Luis Guerín que la primera vez que visitó el barrio (aunque en realidad fuera en 1977) para comenzar con este proyecto, pensaba que era imposible encuadrar ese paraje tan poco uniforme, pero que fueron las miradas que recogió de la gente de Vallbona las que, de una forma, guiaron la idea formal de cómo debía ser la película.

Cartel de la cinta
Lo primero que llama la atención nada más arrancar la cinta es el “Work in progress José Luis Guerín”, que más que resultar anecdótico es muy significativo, dada la manera que tiene de trabajar el director barcelonés, sin ser esta última producción una excepción. La manera de hacer cine de Guerín se siente muy plástica y orgánica, sin buscar resultados precisos a las interrogantes a las que aluden sus distintos trabajos, sino más bien trazándolos desde una mirada llena de afecto y sentido poético.
La película cuenta con un elenco de actores no profesionales, que fueron seleccionados durante el casting (se ve el cartel que se puso en el colegio del barrio en la película) para dar forma a esa heterogeneidad de identidades y de memoria colectiva que pudiera representar el alma y la marginalidad constante en la que ha vivido Vallbona. Historias del buen valle (2025) será estrenada en las salas de cine españolas el próximo 6 de febrero de 2026 de la mano de Wanda Visión, aunque una más que posible Concha de Oro podría hacer que se adelantase su estreno.
Habitar esos espacios en la penumbra
Es difícil hablar de esta película sin emocionarse, porque no solo es un ejemplo claro de cómo el cine debe servir más que nunca como forma de visibilizar realidades invisibilizadas, algo que el genocidio en Gaza ha puesto más de manifiesto, sino que aúna todas esas problemáticas tan candentes en la actualidad como la lucha identitaria, los estragos de la sobreexplotación de la clase obrera del sistema capitalista o los efectos que está trayendo la gentrificación en las zonas periféricas de las grandes ciudades, entre muchas otras cosas.
Tráiler de Historias del buen valle (2025)
Todo ello desde una forma tan bien yuxtapuesta y profundamente poética, que uno no puede más que rendirse ante este trabajo tan excepcional. Es una película que se siente, se ve y se escucha como pocas de este año. Es un cine que nace de la escucha como forma de entender una realidad, lo más ineludible para comprender el resultado final que logra Guerín a través del montaje y de esta aproximación que va de lo particular a lo colectivo. Ese sentimiento de colectividad está muy presente en toda la película, representando realidades que coexisten al mismo tiempo y que son igualmente válidas y bellas. Decía Claire Denis que “el tiempo pasa, pero lo bello permanece” y parece ser así como Guerín ha entendido que debía retratar este paraje tan particular, donde la memoria y el olvido, cada vez más presentes, se forjan en una misma unidad de plano.
Esa idea de colectividad tan reivindicada en el cine por maestros como Víctor Erice se ve totalmente arraigada en la poética visión de otro maestro como es Guerín, en uno de los trabajos más formidables de toda su carrera. Es magistral hasta en la manera de entender el tempo que debía tener el documental, partiendo de su propia estructura geográfica y contexto actual; es decir, desde el arrollador sonido del tren que pasa a pocos metros del vecindario, como el constante bullicio de la autopista colindante que viene de la otra dirección, se exponen en el documental con un sentido muy particular, y no desde una equidistancia.
Porque Guerín no entiende el cine si no es desde el afecto, desde el reconocimiento de la belleza y el sentido más humano de lo visual en aquellos lugares que a simple vista parecerían carecer de ello. Necesitamos más directores como Guerín, directores que iluminen realidades que merecen ser vistas.
Ficha técnica:
Historias del buen valle (2025)
- España
- Duración 122 min.
- Dirección: José Luis Guerín
- Guion: José Luis Guerín
- Dirección de fotografía: Alicia Almiñana
- Productora: Coproducción España-Francia; Los Ilusos Films, Perspective Films, 3Cat
- Género: Documental