Crítica de Babygirl (2024): reseña y opinión de la película
Puntuación ✪ (4/5)
Halina Reijn es una actriz neerlandesa que ha trabajado en numerosas películas, aunque siempre en roles secundarios. En 2019 pasó a la dirección y estrenó su ópera prima Instinto, que no tuvo demasiado reconocimiento a pesar de los destellos de talento en la mirada de la directora que podían apreciarse. La famosa productora y distribuidora A24 confió en ella para su segundo proyecto, Muerte, muerte, muerte (2022), un slasher juvenil que mezclaba el terror con la comedia negra. En este caso, la película funcionó muy bien tanto a nivel de crítica como en taquilla, por lo que han vuelto a confiar en ella para dirigir un proyecto más ambicioso.
En Babygirl (2024) es la primera vez que cuenta con un reparto repleto de grandes nombres y también la primera vez que dirige un guion escrito por ella misma, lo que demuestra que le han otorgado muchos más medios y libertad creativa para este tercer trabajo. Babygirl se centra en la vida de Romy (Nicole Kidman), una gran ejecutiva de una empresa tecnológica. A pesar de llevar muchos años casada y haber formado una familia, de pronto comienza una relación a espaldas de su marido (Javier Bardem), basada en el sexo y la sumisión, con Samuel (Harris Dickinson), un nuevo becario que ha ingresado en la empresa.
En esta película, Halina Reijn da un enorme salto de calidad en la dirección respecto a sus anteriores trabajos, que ya de por sí contenían detalles interesantes. Sin embargo, se puede apreciar claramente cómo ha ido evolucionando a grandes pasos en cada una de sus tres obras.

Cartel de la cinta
Babygirl es, en esencia, una representación voraz de la crisis de envejecimiento de una mujer que ve cómo se aproxima a la tercera edad, desde un punto de vista más físico que mental. Una empresaria poderosa, con una vida aparentemente perfecta, una casa ideal y una familia ejemplar, ve su comportamiento impulsivamente alterado por el deseo sexual.
Lo más interesante que propone Reijn es la inversión de roles, otorgando el poder real a la juventud y a la satisfacción sexual. Esto es un grito de auxilio frente a la dificultad de aceptar el envejecimiento y la necesidad de validación por parte de personas mucho más jóvenes. A lo largo de la historia del cine, abundan los relatos en los que un hombre se relaciona con mujeres mucho más jóvenes. Todos esos antiguos iconos de Hollywood, como Cary Grant, James Stewart o Humphrey Bogart, siempre estaban emparejados con mujeres mucho más jóvenes. Sin embargo, esta película no es simplemente un cambio de género en esas narrativas, sino un enfoque completamente distinto y atrevido que sorprende desde el inicio. Las relaciones de poder, tanto en el ámbito laboral como en el personal, son el tema central de la cinta, explorando cómo ambos se entrelazan y cuál es el lugar de la mujer en esos espacios.
Tráiler de Babygirl (2024)
El relato se construye con calma, dejando claro que no es un arrebato insensato ni algo que ocurre de manera repentina. Es un deseo que crece poco a poco, tanto en lo físico como en la mente de la protagonista. La historia avanza lentamente hacia algo que acaba convirtiéndose en un episodio casi pesadillesco, lleno de incertidumbre y dudas, que conlleva un comportamiento errático e inconsciente mientras la protagonista explora un terreno desconocido.
Nicole Kidman ofrece una de las mejores actuaciones de su carrera, brillando en un papel extremadamente exigente y con una gran variedad de matices. Las apuestas no están muy a su favor en lo que a la nominación al Óscar se refiere, pero sin duda lo merecería. Harris Dickinson no queda opacado en absoluto; está, como mínimo, a su altura y también merece reconocimiento en la temporada de premios. Por otro lado, la actuación de Javier Bardem es correcta, pero ejerce un papel bastante secundario que incluso llega a estar ausente en gran parte del metraje.
La intensidad del relato no solo se sostiene en las actuaciones brillantes, sino también en la dirección. La cámara asfixia a los personajes, casi devorándolos en ciertos momentos para expresar el deseo, el placer y la liberación sexual. Al mismo tiempo, se utiliza para definir y segmentar los espacios, mostrando el distanciamiento o la cercanía entre los personajes según el contexto. La vorágine de dudas que envuelve la historia se refleja en los bruscos cambios en las relaciones, hábilmente expresados a través del posicionamiento de los personajes en cada plano. También destacan el uso de la música y el montaje, que son simplemente excepcionales. Desde el punto de vista estético y sonoro, la película es espectacular, con imágenes de una potencia visual abrumadora. Una obra impactante y considerablemente rompedora tanto en lo que cuenta como en las formas que utiliza.
Ficha técnica:
Babygirl (2024)
- Estados Unidos
- Duración 114 min.
- Dirección: Halina Reijn
- Guion: Halina Reijn
- Música: Cristobal Tapia de Veer
- Dirección de fotografía: Jasper Wolf
- Productora: Coproducción Estados Unidos-Países Bajos (Holanda); 2AM, Man Up Film, A24. Distribuidora: A24
- Género: Drama
Es una mala película porque la historia que se cuenta es mala también. De hecho, vi salir a personas del cine antes de su finalización.