Crítica de Secretos de un escándalo (2023): reseña y opinión de la película
“Solo puedes encontrar la verdad con la lógica si ya la has encontrado sin ella”
Puntuación ✪✪ (3,5/5)
Crítica de Juan Pablo Bargueño
En la industria cinematográfica, sobre todo en la hollywoodiense, el subgénero del melodrama ha sido siempre uno de los mayores generadores de ingresos. La lista es incalculable, con películas clásicas como Lo que el viento se llevó (1939), Gilda (1946) o Las Zapatillas rojas (1948), u otras más contemporáneas como Magnolia (1999), Carol (2015) o Borkeback Mountain (2005).
Denominado horriblemente como el women’s picture o women’s film —película para mujeres—, el melodrama se ha caracterizado por la exageración en la representación de los sentimientos de los personajes, sobre todo en tramas románticas. En esto está especializado Todd Haynes —si exceptuamos otras películas suyas que se centran en figuras de la cultura pop musical, como Velvet Goldmine (1998)—. El director estadounidense vuelve a traernos una trama melodramática un tanto peculiar en su nueva película, Secretos de un escándalo (2023), estrenada la semana pasada en el Festival de Cannes.
Gracie (Julianne Moore), una figura mediática hollywoodiense, fue protagonista de un escándalo a nivel nacional cuando, hace veinte años, fue descubierta teniendo relaciones sexuales con su actual marido, Joe (Charles Melton), cuando este solo tenía 13 años. En la actualidad, la actriz Elizabeth Berry (Natalie Portman) viajará a la casa del matrimonio con la intención de realizar una exhaustiva investigación de sus vidas y su pasado para una futura película en la que Elizabeth interpretará a Gracie.
Póster de la película
Algo más que un melodrama
El melodrama, como ya se ha dicho, se caracteriza por la exageración. Nuestro conocimiento generalizado interpreta que esta exageración tiende al drama. Sin embargo, Haynes parece haberse negado a volver a este estilo tan marcado del subgénero, y ha decidido dar unos cuantos pasos a un lado, ofreciendo un melodrama irónico y, en ocasiones, absurdo.
La verdad sea dicha: la primera toma de contacto con Secretos de un escándalo me descolocó. Tal vez esperaba algo distinto de Haynes. La ironía que maneja en esta película juega con lo mediático y con situaciones incómodas que se alejan de la seriedad que se espera con relación a la trama que plantea —cosa que llega más adelante—. Aun así, la ironía que Haynes maneja llega a ser exitosa, sobre todo en la disnonacia que crea entre situaciones absurdas y la histriónica banda sonora.
¿Qué es el amor?
A pesar de lo sarcástica que puede llegar a ser la cinta, Haynes expone algo que, tras dejar reposar la película, empieza a ser verdaderamente interesante. La cuestión más importante de Secretos de un escándalo —lo demás es puro caparazón—, es el amor. Gracie y Joe aparentan ser una familia perfecta; ambos demuestran su amor incondicional a pesar de tener que remar contra la prensa y la opinión pública. Sus hijos van a la universidad, son felices y los vecinos les tienen en cuenta.
Trailer de Secretos de un escándalo (2023)
Hay varias escenas en el filme que dejan de lado el tono burlesco dominante, para indagar en la cuestión del amor. Aquí, tanto Julianne Moore como Charles Melton ofrecen soberbias actuaciones. En este sentido, Haynes divaga sobre si realmente, aquello que ocurrió hace años, que ha resultado en la familia de ahora, es amor. La complejidad del asunto se trata desde la distancia, como si el director tirase la piedra y escondiese la mano. Nos encontramos, pues, ante un tema y unos personajes extremadamente complejos, y lo mejor de todo es que no obtenemos una respuesta. Aquí rige el pensamiento del ‘y si hubiese sido de otra forma’; lo que resulta en el universal remordimiento ante el hipotético caso de lo no ocurrido.
“Nunca es igual saber la verdad por uno mismo que tener que escucharla por otro”
En Secretos de un escándalo se pueden encontrar ciertas trazas de los dramas psicosexuales de Alfred Hitchcock, sobre todo en el personaje interpretado por Natalie Portman, claramente referenciado en ciertos momentos de la investigación donde Elizabeth trata de convertirse en un doble —algo siniestro— de Gracie.
Haynes recurre a la citación, por ejemplo, de Bergman, en una exquisita cinematografía que recurre al tema del doble o del espejo, todo ello en una configuración sutil e inteligente. Esta configuración acaba por convertirse en un ‘toma y daca’ entre Gracie y Elizabeth, que revolverá la lógica establecida, y que no podrá desvelar la verdad plena. La psicología que se intenta desenmascarar resulta en algo mucho más laberíntico de lo que la razón o los rumores nos quieren hacer creer.
Conclusión
Aunque Todd Haynes esté de vuelta con un melodrama, Secretos de un escándalo se distingue del resto de su filmografía por su concepción burlesca, que, en ocasiones, no acaba de convencer. El director estadounidense apuesta por el sarcasmo para formular un verdadero drama mediático y familiar donde se cuestiona qué es verdaderamente el amor y la verdad. A partir de estos temas, Haynes compone, con indiscutible maestría cinematográfica, una cinta que explora la psicología de los personajes, concluyendo, inevitablemente, en el desconocimiento y la ambigüedad.
Ficha técnica:
May December (2023)
- Estados Unidos
- Duración 113 min.
- Dirección: Todd Haynes
- Guion: Samy Burch.
- Dirección de fotografía: Christopher Blauvelt
- Productora: Gloria Sanchez Productions, Killer Films, MountainA, Project Infinity, Taylor & Dodge
- Género: Drama