Crítica de El último verano (2023): reseña y opinión de la película
Puntuación 
½✪ (3,5/5)
En el año 2019, la directora danesa May el-Toukhy estrenaba Reina de corazones, teniendo muy buen recibimiento en numerosos festivales. No es habitual ver remakes con tan poca diferencia de tiempo, y cuando se ven, en la mayoría de los casos, se tratan de versiones estadounidenses de películas europeas que han funcionado bien.
Pero esta es una versión francesa, que, si bien se nota más calidez en sus personajes que en el cine nórdico, es una versión que no varía apenas de la original. Siendo Catherine Breillat la que estaba detrás del proyecto, una directora con una mirada sobre el cine tan particular, daba a pensar que las diferencias serían notables, pero no es el caso. La cinta aborda temáticas recurrentes en su cine, pero no llega tan lejos, está mucho más comedida de lo que acostumbra, haciendo que sea probablemente su obra más accesible.
Desde su debut en 1976 con A Real Young Girl, Catherine Breillat, con 75 años en la actualidad, siempre ha sido una directora polémica que ha generado división de opiniones, ya que los principales temas que abordan sus películas son el erotismo, los cuerpos, el placer y la libertad sexual. Sus trabajos más famosos son Romance X (1999) y Fat Girl (2001). Ella es de las figuras más importantes del “nuevo extremismo francés” que surgió a principios del siglo XXI, encabezado también por grandísimos cineastas como Claire Denis, François Ozon, Gaspar Noé o Leos Carax, entre otros. Un movimiento que apuesta por un cine de transgresión, propuestas arriesgadas y poco habituales tanto en sus temáticas como en sus formas.
Cartel de la cinta
El último verano (2023) nos sitúa en la vida de un matrimonio adinerado de mediana edad y sus dos hijas pequeñas, que viven en una lujosa casa a las afueras de la ciudad. Un día, el hijo mayor del matrimonio anterior del marido, se muda con ellos a pasar una temporada. Poco a poco empieza a entablar buena relación con su madrastra, Anne (Léa Drucker), llegando demasiado lejos y creando problemas de difícil solución.
“El vértigo no es el miedo a caer, sino el miedo a la incontrolable tentación de la caída.”
Esa frase que dice Anne, define gran parte del peso argumental y dramático de la obra, la encrucijada y enredo mental en el que se encuentra la protagonista, un problema que ha creado ella de la nada, un pozo cada vez más profundo del que parece difícil salir sin asumir las consecuencias. En la forma de presentar y definir a Anne, es donde más diferencias hay con la original. Breillat abstrae la idea de que ella pueda ser una depredadora o una abusadora y muestra que sencillamente se movió por impulsos, y que, una vez hecho, el miedo se apodera de ella, haciendo que siga actuando de forma indebida. El miedo a perderlo todo, su vida de burguesa acomodada, su lujosa casa con jardín y su maravillosa familia. Hace que todo se convierta en una pesadilla, en un juego de mentiras y traiciones.
Tráiler de El último Verano (2023)
Léa Druker está impresionante, lleva por completo el peso de la película, muy por encima de todo el reparto, que, sin estar mal, ninguno de ellos ofrece una actuación demasiado destacable.
Tiene una puesta en escena que por momentos recuerda al cine de Eric Rohmer, especialmente en esos espacios soleados de mañanas veraniegas y en esas conversaciones distendidas de sobremesa. También en decisiones de dirección, se nota la mano de Breillat, apostando mucho por largas secuencias de planos fijos y haciendo únicamente uso de suaves zooms a medida que aumenta la tensión o la intensidad. Está bien trabajada la disposición de los personajes en el plano, que los separa o los divide dependiendo del momento y lo que esté sucediendo. Además, es muy inteligente escogiendo los espacios en los que decide rodar, especialmente para presentar a los personajes. Hay varias situaciones, por ejemplo, la primera vez que vemos al hijo y a Anne interactuar, es en un pasillo muy estrecho en el que apenas caben los dos y él está recién salido de la ducha sin camiseta.
Hay algunos momentos en los que avanza la trama, que están construidos un poco atropellados y de forma un tanto inverosímil. Pero todo lo que muestra en sí, para la mayoría de la gente va a estar alejado de la realidad que viven, por lo tanto, ya es decisión del espectador si entrar o no en el juego que propone Breillat. En términos generales es una buena película, aunque deja la sensación de que podría haber sido algo mucho más potente y diferente a la versión danesa, sabiendo quién estaba detrás del proyecto. Llega a las salas españolas este viernes 24 de mayo.
Ficha técnica:
L’été dernier (2023)
- Francia
- Duración 104 min.
- Dirección: Catherine Breillat
- Guion: Catherine Breillat. Guion original: Maren Louise Käehne, May el-Toukhy
- Dirección de fotografía: Jeanne Lapoirie
- Productora: SBS Productions, Cine+, Pyramide Productions, Canal+
- Género: Drama Psicológico