Crítica de El triángulo de la tristeza (2022): reseña y opinión de la película

“Venta de estiércol”

Puntuación ⭐✪✪✪✪ (0,5/5)

Crítica de Dani Jiménez

Triangle of Sadness(En español El triángulo de la tristeza) es la última película de Ruben Östlund, la cual ganó la Palma de Oro en el pasado Festival de Cine de Cannes; el director sueco, ya había ganado anteriormente el gran premio de Cannes, con The Square (2017). El triángulo de la tristeza pretende ser una alocada y divertida sátira sobre la burguesía, queriendo reflexionar sobre cuestiones identitarias en cuanto a las clases sociales se refiere. Un The White Lotus (2021-) que pretende ser algo más elevado, pero que resulta ser algo banal y tremendamente pretencioso.

Östlund cree habernos regalado El discreto encanto de la burguesía (1972) del siglo XXI, y lo peor de todo es que algunos se lo compran y se lo reconocen como tal, pero ya hablaremos de eso a lo largo de la crítica.

La película está protagonizada por Dolly de Leon, Zlatko Burić, Charlbi Dean, Harris Dickinson, Woody Harrelson o por Vicki Berlin, entre muchos otros. Triangle of Sadness tendrá su estreno en las salas de cine españolas, el próximo viernes 17 de febrero.

Primera parte: Vergüenza ajena

Triangle of Sadness 2022 opiniones y reseña

Póster de la cinta

El comienzo de la cinta expone vagamente y con una simpleza desmesurada, la cara más frívola y superficial de la sociedad contemporánea, donde la imagen lo es todo. Östlund intenta sacar comedia de ello, aunque en lo que respecta a mí como espectador, me haya generado más vergüenza ajena que gracia; la cual carece de ella por completo. Es totalmente ridículo y se nota un tono de condescendencia por parte del director, inmensamente irritante; ya que considera que el público es tan bobalicón como él.

Odio cuando un director emprende un trabajo, creyéndose que va en todo momento dos pasos por delante de la audiencia, y más cuando no se da y lo que llevas a cabo es algo pueril y grotesco. Los personajes son absolutamente planos, los cuales toman acciones que ni nos interesan, ni tienen sentido alguno. No es una sátira valedora de una Palma de Oro, ni digna que se le considere como tal, porque la capacidad de su director de reflexionar sobre el modelo de clases y el cambio de roles dentro de él es tan vago, que parece una cinta hecha por María Pombo. Si al menos se hiciera divertida y tuviera cierto ritmo narrativo, pero es que ni por esas se salva, siendo una de las películas más soporíferas que me tocó ver el pasado año.

Tráiler de El triángulo de la tristeza (2022)

Segunda parte: Vomitiva

Las escenas que transcurren a posteriori en el crucero, siguen de manera entusiasta queriéndonos matar de absoluto bochorno. El mero hecho que justifique esta auténtica mamarrachada, dando a entender que lo que pretende en todo momento es ridiculizar a la clase alta, lo convierte en algo aún más esperpéntico y de no saber cogerlo por ningún sitio. La gente, que no se espere algo sofisticado o con cierta hondura, porque esto no es más que una mamarrachada más, de un director que pretende hacer una crítica social, como si se sirviese de algo visto en un video de TikTok.

En cuanto a las interpretaciones, la única salvable y la cual no me ha causado vergüenza ajena ha sido la de Dolly de Leon, que tiene momentos medianamente interesantes en pantalla. El resto es una panda de personajes súper estereotipados, vulgares y predecibles. No me cabe en la cabeza, aunque su participación sea más testimonial que otra cosa, que Woody Harrelson se haya prestado para esta pantomima. No se da el que veamos personajes poliédricos, que partan de una imagen aparentemente estereotipada, pero que luego acaben demostrando ciertas complejidades y un arco a recorrer; aquí, la gran mayoría de personajes son planos de principio a fin, y cuando tienes personajes planos, las interpretaciones siempre acaban siendo insulsas y olvidables.

Tercera parte: La isla de las tentaciones

El punto de inflexión que marca el paso del segundo acto al tercer acto, es llevado a cabo de la manera más predecible y poco inteligente que se podía hacer. El as que guardaba Östlund y que pretende ser aquello que dé un giro de 180 grados, es lo que todos sabíamos que iba a pasar, desde el momento en el que toda esta pila de personajes pisó el yate por primera vez. Frivolidad tratada con frivolidad, con una ausencia de humor que se hace dantesca y donde todo va a la deriva. Cuando pensabas que la película no podía caer más bajo, va y te salpica tres veces más con un racimo de vómito en forma de cinta súper alocada y subversiva.

La manera que tiene de alcanzar el clímax final y de dar sentido a este despropósito, es la gota que colma el vaso. Siendo un ejemplo descarado de “Deus ex machina”, Östlund intenta ser provocador sin saber cómo, dejándote una sensación de haber perdido dos horas y media de tu tiempo y replanteándote volver a tu psicólogo en el centro de Madrid. Sueno categórico, lo sé, pero el que me haya leído anteriormente sabe que siempre intento sacar algo positivo de todas las películas, evitando ser un Boyero de turno, pero es que esta película ha conseguido ofenderme de verdad y más, cuando se alza con la mayor distinción cinematográfica que una película podría tener como es la Palma de Oro de Cannes.

Conclusión:

Triangle of Sadness es una flagrante burla a la inteligencia de los espectadores y una de las peores Palmas de Oro que recuerdo en mucho tiempo. Un despropósito de película que  no hay por dónde cogerla, donde el intento de sátira que intenta vender su director, solo consigue causar una tremenda vergüenza ajena hacia ella. Hay un momento en el que uno de los personajes dice que vende estiércol, y creo definitivamente que hasta el propio Östlund sabe que hace lo mismo con su cine, pero lo triste de todo esto resulta ser, que ese estiércol acaba por comprarse en Cannes, los Oscars y en un sinfín de lugares más.

Ficha técnica:

Triangle of Sadness (2022)

  • Suecia
  • Duración 149 min.
  • Dirección: Ruben Östlund
  • Guion: Ruben Östlund
  • Música: Jonny Greenwood
  • Dirección de fotografía: Fredrik Wenzel
  • Productora: Coproducción Suecia-Francia-Reino Unido-Alemania; Plattform Produktion, SVT, Film I Väst, arte, Coproduction Office, arte France Cinéma, Eurimages, ZDF/Arte, Imperative Entertainment, BBC Films
  • Género: Comedia. Drama

2 comentarios en «Crítica de El triángulo de la tristeza (2022)»

Deja un comentario