Crítica de Beach House (2023): reseña y opinión de la película

Puntuación ⭐⭐✪✪✪ (2/5)

Crítica de PJ Martínez

Un largometraje insuficiente que se presenta como una comedia crítica con el turismo de borrachera, pero que no consigue enganchar dejando una película tediosa de ver

Dentro de la Sección Balearics del Atlàntida Mallorca Film Fest se encuentra Beach House, un thriller de comedia dirigido por Hèctor Hernández Vicens, empezando como una especie de clásica comedia de jóvenes en celo y se torna en un thriller que no consigue enganchar… dejando una película irregular y soporífera.

El argumento se centra Xavi, Isaac y Manu, tres amigos que van a Magaluf, pueblo por excelencia de la fiesta barata, a tratar de tener una escapada inolvidable quedándose en la casa del tío de uno ellos, que funciona en una parte como Airbnb. Los problemas vendrán cuando Xavi se enamora de la huésped de su casa, una rusa que resulta ser la novia de un narcotraficante y con la que el trío se mete de lleno en problemas, convirtiendo este fin de semana de fiesta en un infierno.

Beach House es una película que parece una versión millennial del Landismo, con su toque picante heredero de American Pie, presenta a tres personajes que son la encarnación del turista medio de borrachera en su faceta más desagradable e insoportable, recordando a los protagonistas de Hostel, el gorno de Eli Roth. Tan desagradables, que cuando la historia se tercia contra ellos, el espectador acabará por sentir más simpatía por el villano que los protagonistas.

Crítica de Beach House (2023) opiniones

Póster de la cinta

Unos personajes planos, sin arcos, que son una galería de arquetipos en el tipo personaje que más abunda es el guiri borracho. Siendo, en resumen, los protagonistas unos secundarios de una historia de terror que acaba como empieza, recordando a los de la fallida película de Alex de la Iglesia, Veneciafrenia, en la que también se trataba las consecuencias del turismo, aunque en ese caso desde un slasher malogrado.

La parte social es el retrato de uno de los puntos de la vergüenza de la costa española, Magaluf, donde hordas de turistas europeos, sobre todos ingleses, se emborrachan hasta desfallecer de alcohol barato, en un pueblo condenado ya a ser un icono del turismo de borrachera, donde los vecinos tienen que convivir con veraneantes beodos en un infierno de garrafón que al inicio de la cinta se nos introduce con un noticiario pero que luego no tiene ningún peso, pudiendo transcurrir en Benidorm, Málaga o Torremolinos, que las diferencias serán mínimas.

Beach House fotograma película

Fotograma de Beach House (2023)

Pues tristemente este modelo turístico se ha expandido como la pólvora, más con la proliferación de los aparamentos turísticos y la permisividad de las instituciones, que prefieren el dinero fácil de este tipo de turismo a tener que controlarlo, y de cara a la galería niegan, dejándolo como casos aislados de las masas de buenos turistas que vienen a mantener la economía frente a los amargados vecinos que se quejan y no aportan nada al progreso de la ciudad.

Un tema social que se echa a perder cuándo todo se torna en un thriller criminal, en el que los protagonistas no son más que peones que en una película media del género no serían más que personajes de reparto que mueren en el primer acto o rehenes que protagonista tiene que rescatar. Pero que en Beach House se torna en una especie de agonía, para los personajes y el espectador, que tiene que ver como pasa el tiempo esperando un giro para intentar seguir la historia, pero nunca llega, que va directo a hacia su final a paso lento. La falta de ritmo, aunque introduzca elementos de tensión, hace que esta historia por momentos sea insoportable. Lo único destacable es que es corta, por lo que en unos tiempos de largometrajes largos, se hace pasable ver en ese aspecto.

En conclusión, Beach House es un largometraje insuficiente, falto de ritmo y con unos personajes simples con los que cuesta empatizar, pudiendo aprovechar el potencial de su localización, la desaprovecha para dejarnos una historia que podría ser una noticia de tres párrafos dentro de la crónica negra.

Ficha técnica:

Beach House (2023)

  • España
  • Duración 76 min.
  • Dirección: Hèctor Hernández Vicens
  • Guion: Hèctor Hernández Vicens
  • Música: Santos Martínez
  • Dirección de fotografía: Juan González Guerrero
  • Productora: Zabriskie Films, Visualsuspects, IB3 Televisió, Silendum Films, La Charito Films, Institut d’Estudis Baleàrics, TV3 Distribuidora: Filmin
  • Género: Comedia, Thriller.

1 comentario en «Crítica de Beach House (2023)»

  1. El chico que ha escrito esa reseña es alguien que se intenta dedicar al cine dirigiendo y escribiendo y no puede. También ha destrozado la película en Filmin.
    Páginas como esa pueden destrozar pelis sin ningún tipo de crítica cinematográfica? Solo con sentencias? Y spoiler?
    Páginas de cine pueden tener a frustrados incapaces de escribir sobre cine?

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